Guía para potenciar tu perfil profesional en las redes sociales
¿Cómo elegir la mejor red social para su consulta?
Antes de elegir en qué redes sociales quiere estar presente, es importante saber si ya tiene una reputación
online. Por ello, recomendamos hacer una búsqueda de su nombre y ver si se está hablando de usted en Internet.
Una vez hecho esto, deberá planificar su estrategia en los medios sociales. No es necesario que abra un perfil en todas las redes sociales existentes, sino que debe elegir aquellas que le vayan a funcionar mejor en función de sus objetivos.
De hecho, abrir un perfil en todas las plataformas puede resultar contraproducente ya que, para gestionarlas de forma correcta, es necesario invertir tiempo y esfuerzos. Más vale elegir una o dos redes sociales y mantenerlas activas y con un contenido de calidad que abrir muchos perfiles y que acaben quedando en desuso por falta de tiempo.
¿Cómo gestionarlas?
Anteriormente hablábamos de que el primer paso para empezar en las redes sociales era definir los objetivos, hacer un plan de contenido y saber la frecuencia con la que vamos a publicar. Ahora que ya ha decidido en qué redes quiere estar presente, es recomendable planificar el contenido que va a publicar y crear un calendario de publicaciones. De esta manera, podrá adelantarse a eventos que sabe que van a producirse como una fecha señalada o un congreso. A partir de ahí, podrá crear y programar publicaciones previas a dichos eventos.
Además, tendrá que plantearse otras cuestiones como:
¿Qué tono va a utilizar? Cada red social tiene sus peculiaridades, por lo que es bueno adaptar el tono de
comunicación a cada una de ellas. Sin embargo, debemos tener establecido de antemano cuál es la línea que vamos a seguir. De esta manera, independientemente de si gestiona las redes sociales directamente usted como si contrata este servicio a una empresa, la gestión no cambiará en función del Community Manager que lo lleve. Por tanto, en líneas generales, el tono en Facebook o Instagram será cercano y emocional. Por contra, en Twitter debería utilizarse un tono más informal pero informativo al mismo tiempo. En el caso de LinkedIn, la comunicación debe ser informal y profesional.
Adaptar el mensaje a cada plataforma. Como decíamos en el punto anterior, si ha decidido abrir un perfil en más de una plataforma, aunque puede compartir los mismos contenidos, deberá adaptar el mensaje a cada una de ellas. Ya hemos visto que el objetivo y el tono de cada red social es distinto, por lo que también los miembros esperan un mensaje diferente según si están en Facebook, Instagram, Twitter o LinkedIn.
Vigilar la ortografía. Sus perfiles serán públicos, por tanto, todo el mundo podrá seguirle. Encontrar faltas de ortografía en sus publicaciones influirá negativamente en la creación de su imagen. Por ello, recomendamos evitar el uso de abreviación de palabras para ahorrar en caracteres y revisar bien el contenido antes de publicarlo. Aunque en Facebook o Instagram tenemos la opción de editar la publicación si vemos alguna incorrección, plataformas como Twitter no permiten realizar cambios una vez publicado un Tuit y sólo podríamos eliminarlo y rehacerlo de nuevo.
Vigilar las imágenes que se suben. Como hemos comentado, no se trata de gestionar un perfil personal, sino que queremos dar una buena imagen como profesionales de la salud. Por este motivo, habrá que tener cuidado con las imágenes que se suben a nivel de calidad y de contenido. No subiremos imágenes que puedan dañar la sensibilidad de nuestros seguidores.
No responder a preguntas concretas sobre síntomas o enfermedades. Estar presente en redes sociales no significa abrir un consultorio médico en Internet abierto a todo el mundo. No es lo mismo recomendar a alguien que acuda al médico para hacerse un chequeo que hacerle un diagnóstico a través de Internet, sin verlo en persona o sin hacerle las pruebas necesarias.
¿Por qué es importante fidelizar a tus pacientes?
Las profesiones que se dedican al ámbito de la salud se encuentran entre las más respetadas, ya que
convertirse en un especialista en este sector no es algo sencillo: requiere de preparación, experiencia y
conocimiento.
Pero ¿cómo equilibrar todas las exigencias de la profesión y fidelizar pacientes para que vuelvan a su consulta y le recomienden? ¿Qué es lo que valoran los pacientes a la hora de buscar un especialista en salud?
En el ámbito de la salud, la confianza y las recomendaciones son esenciales. Cada vez más, los pacientes dan importancia a la atención médica y cambian de profesional con facilidad si no están satisfechos. Por este motivo, si los pacientes sienten que han encontrado a un profesional serio y comprometido, serán más fieles y propensos a volver a su consulta y a recomendarle.
Las nuevas generaciones son cada vez más propensas a cambiar de especialista si sienten que no tuvieron una buena experiencia.
Conclusión: invertir en la fidelización de sus pacientes actuales aportará más valor a su trabajo y, además, le diferenciará de otros especialistas, ya que será reconocido por ofrecer una buena experiencia. Por otro lado, esa buena reputación, se traducirá en recomendaciones a nuevos pacientes ya sea mediante el boca a boca o bien a través de las opiniones de Internet.